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La Guerra creada de los Seres Humanos

  • Foto del escritor: Eliana Padron
    Eliana Padron
  • 13 jul 2019
  • 7 Min. de lectura

Al enterarnos de una guerra lo primero que haríamos es preguntar

¿Que guerra es esta?

O tal vez preguntaríamos,

¿Cuál es la razón de esta guerra?

O ¿Cual es el nombre de esta guerra?

O quizás

¿Dónde esta aconteciendo este suceso?

O solo tal vez diríamos

¿Otra mas?

Voy a comenzar este ensayo hablando primero que todo del fantástico planeta en donde habitamos, o sea nuestro hogar terrenal, este maravilloso y minúsculo planeta dentro del infinito universo llamado Tierra, es también denominado Gaia o Gea, el cual ha presenciado y vivido incontables guerras, una tras otra como una escena repetida con diferentes personajes, en diferentes escenarios, pero todas llenas de violencia, sangre, masacres, genocidios, devastación y podría continuar sin parar escribiendo un sinfín de atrocidades protagonizadas, pero lo mas increíble de todo es que la mayoría coinciden en decir que todo a sido en nombre de Dios.

Les parece que lo que estoy diciendo es una blasfemia, así parece, pero la realidad es otra.

Nos han hecho creer eso, la verdad es que el agigantado ego del hombre lo ha llevado bien sea por intereses propios o colectivos a todo esto, también se les puede calificar como gobiernos, reinados, imperios, monarquías, elites, cultos, logias, etc., lo cierto es que todas sin excepción están ligadas a una religión.

Y esas múltiples religiones y creencias han sido creadas por el hombre, Dios no creo nada de eso, me disculpan, pero

¿De que Dios hablan la mayoría cuando afirman que hay de un Dios castigador?

Un Dios lleno de furia que acabara con todos nosotros sino acatamos los preceptos establecidos por cada una de esas creencias causando temor, odio, intolerancia, hacia todo aquel que no este en acuerdo con lo establecido por ellos y ciertamente la historia del planeta se ha encargado de registrarlo.

Para refrescarnos la memoria vamos en el tiempo al pasado y conseguimos que la primera guerra de la que se tenga testimonio escrito fue hace 4.500 años, A.D llamada Sumer.

Las ciudades sumerias de Lagash y Umma se enfrentaron en una guerra que duro mas de un siglo, quedando constancia de esto en el anverso de la Estela de los Buitres, con la que el rey Eannatum de Lagash conmemora su victoria sobre Umma. Actualmente esta pieza de grabados se encuentra en el museo de Louvre en Paris.

Es aterrador el solo hecho de pensar que una guerra haya durado un siglo, pero esta es solo la primera donde existan registros escritos, no por eso sea la primera guerra en el planeta, así que calculen cuantas mas habrá habido que no se tengan documentación.

Semejante locura de humanos en contra de humanos y de allí se desprende una constante que se ha repetido incontables veces llamada guerra, dejando devastadas ciudades, continentes, un planeta asfixiado y claro esta cada vez con armas mas sofisticadas.

Pero a lo que quiero ir con esta introducción es a la guerra tan voraz que existe y ha existido, del hombre en una eterna contienda con su ser, aunque convivimos uno con el otro, el ego o lo que llamamos mente no soporta al ser o sea a nuestra esencia.

Esta lucha entre lo que realmente somos y lo que creemos ser, o lo que nos han inducido esta muy lejos de la realidad, este programa preestablecido por un minúsculo grupo a los que denominan Elite, también llamados mente colectiva, o sueño del planeta, son los que controlan este mundo llevándolo al caos total, son los mismos que venden o introducen esa frase que se escucha como un eco y que además la vemos constantemente en películas y series, “El Nuevo Orden Mundial”, les parece familiar, claro que si.

La misma no es mas que otro mecanismo de control total para la humanidad, yo me atrevería a decir que realmente la frase debería ser, El actual desorden Mundial.

Claro esta hay muchas teorías al respecto, hay relatos históricos fidedignos de su inexorable presencia, pero realmente no voy a profundizar sobre ellos, porque saben algo tampoco son tan reales como nos han hecho creer, ellos se valen de la patología del ego que asume la forma de violencia física, y la violencia en cualquiera de sus formas es un mecanismo primitivo que aun prevalece en el planeta, es este mecanismo el que han utilizado y aun lo siguen haciendo.

Ahora les voy a poner un ejemplo, seguro que todos en algún momento han visto alguna película de Walt Disney, recuerden que siempre hay una princesa que es atrapada por el embrujo de alguien que quiere el poder, entonces trasládense al cuento, al principio todos los escenarios son coloridos, hermosos, llenos de vida, pero después del embrujo o la poción, todo aparece en blanco y negro, todo devastado, sombrío, una fuerza oscura todo lo acaba creando un caos, hasta llegar al final del cuento donde siempre hay un final feliz que todos conocen, que acontece cuando llega el príncipe o la princesa y acaban con el hechizo, aniquilando aquella fuerza oscura, luego la celebre frase y todos vivieron felices por siempre, jamás y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Ese cuento también es un programa como todo lo que nos ofrecen, y queridos lectores esa es la realidad del planeta, lo mas espeluznante es que la esclavitud mas alarmante actualmente en el planeta es la televisión, la cadena perpetua de la que se vale esta gente.

Les parece conocida esta anécdota pues es así ya que no solo es la inconsciencia de las naciones, o la inconsciencia colectiva, sino que es la inconsciencia de cada ser humano, cada uno, en una búsqueda incansable de algo, bien sea que se llame poder, éxito, felicidad, paz, dinero, posesiones, en un sinfín de términos, por ser el mejor, por el deseo de tener, por el deseo de triunfar, todo lo que nos han vendido y nos mantienen atrapados en ese juego.

Lo cierto es que ya somos, no necesitamos buscar ni la paz, ni el amor, ni la felicidad, ni encadenarnos a una filosofía, religión o creencia, porque cuando el ego obtiene algo, inmediatamente eso ya no le satisface y va por mas, esto a desencadenado esta locura colectiva como un virus psíquico que ha sido introducido en cada uno de nosotros atrapándonos bajo el embrujo de las creencias, de los espejismos de la mente.

Esos queridos lectores es la mayor guerra que hay en el planeta es el humano, materia, mente, ego que es lo mismo, el cual no tolera al ser.

El ego es lo que ha desencadenado toda esta locura colectiva que la vemos diariamente reflejada a través de los medios de comunicación ahora llamados redes sociales, los cuales son otra forma de manipular la mente con estos programas, donde generan mas violencia, donde generan un gran control para tener al humano anestesiado, adormecido, atontado, narcotizado, es como un parasito que se a incrustado lo cual a generando una pandemia.

Una vez tuve un sueño o quizás solo me traslade a la realidad, donde vi a todos los humanos como en una especie de almacén gigantescos en capsulas de cristal, conectados, fue una visión escalofriante, esto lo refleje en uno de mis cuentos titulado: “El Portal detrás del Espejo”, donde en una raza pura y perfecta, hubo un ser que cruzo la línea del tiempo despertando toda clase de caos.

Muy similar a la realidad que vivimos o creemos vivir, el tiempo existe solo a través del espacio y la materia se manifiesta, pero si eres consciente que no eres materia, el tiempo y el espacio dejan de existir, así de simple, eso no es un misterio, eso es lo que somos, pero nos han inducido, infiltrado toda una sarta de mentiras que repetidas se han convertido en una realidad, quizás por aquello que llaman zona de confort nos quedamos inmersos allí, lo que si es cierto es que nadie debe despertar a nadie a la fuerza ya que este proceso llega solo.

Pero la buena noticia señores es que no requerimos estar incontables horas en meditación, no requerimos estar en ayuno, no requerimos estar en sacrificio, no requerimos estar en celibato, no requerimos querer ser Buda o Cristo, porque cada uno de nosotros es único, si te conviertes en Buda o Cristo es tu derecho, tu libre albedrio pues eso es la iluminación, pero Jesús el Cristo es único, Buda el Gautama es único, ellos vinieron y nos dejaron con sus vivencias, la señal perfecta de que podemos lograr la iluminación en la sencillez, y esa clara señal para despertar es volver a ser niños, en lo cotidiano, en lo que llamamos ordinario, allí reposa todo.

Cuando dejas la mente, el ego muere porque uno no puede subsistir sin el otro, por lo tanto, amigos el camino es mas simple de lo que creemos, no es un misterio, no es un secreto, es solo estar aquí y ahora, es estar presente en el momento, es entender que solo el amor nos mantiene en perfecto estado de consciencia.

Entonces llegar al Nirvana no es un asunto de magia, si eso es lo que crees te vas a decepcionar, el Nirvana, lo que definimos como la iluminación es un estado inherente al ser, donde despiertas, donde los deseos ya no existen, estas consciente, vives en la plenitud de la sencillez sin buscar absolutamente nada porque ya todo lo tienes.

Es el momento de tomar consciencia, solo observa y veras que las guerras también son creaciones, que esa guerra entre el humano y el ser también ha sido creada, para tenernos controlados.

Cuando la consciencia toma consciencia de si misma, allí esta el despertar entras en la no mente, cesa toda búsqueda, el ego muere y termina la guerra, el planeta esta en eso de a poco y ese es el camino que esta tomando, las luchas que se ven es porque esa mínima parte no quiere perder el control, pero les garantizo que hay un orden muy por encima de todos ellos que están apostando a favor de nosotros, mira las señales, deja el cajón, deja todo aquello que te mantenga encadenado, me entiendes verdad, lee entre líneas.

Despierta, desconéctate, atrévete, no tengas miedo, nada va a pasar, lo único que va a acontecer es que veas tu ser, sientas el amor, sientas una felicidad tan grande que irradiaras a cuantos tengas cerca de ti y eso es una ola expansiva que se va propagando despertando a otros.

Autor: Eliana Padrón

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